Desde más de 5 años, estoy estudiando con Elisabet en su taller de la zona del Liceo Francés. Estas son las últimas piezas saliendo del horno.

Mi primer taller, estuvo encontrándolo gracias a una amiga (francesa igualmente). Tenia las ideas bien claras desde el inicio: quería aprender torno. 

Cuando era pequeña, mi madre, que siempre ha sido manita y con alma de artista aunque era profe de infantil, me permito tocar el barro ¡y no tener miedo a ensuciarme! 
Pero cuando la veía crear piezas al torno, creo que me entraba una envidia que no se me había quitado hasta el momento que yo misma pude practicar esta actividad.
"Esto es magia" (tuve que pensar)... pero no lo es, en absoluto.
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Entonces entré en el taller de Nuría, en la zona de Salamanca, y en un taller muy luminoso escondido al fondo de una corre llena de flores, me puse a practicar los primeros gestos.

Este taller ya ha sido cerrado para el público, y si Nuría sigue practicando por si misma, no acoge más alumnos de Alfarería.